EL grito

EL grito
Edvard Munch

jueves, 7 de febrero de 2008

Selecciòn de Poemas

Postales

Postal de sábado en el suburbio.
Si estás ahí no es una pregunta , aunque así te la formule. Qué noche , qué frío, cuánta humedad. Te estabas poniendo cianótico y eso en Buenos aires, se paga muy caro. Creo que sin amor o algo así.En este barrio suburbano todos viven malditos, descorchan botellas sólo los sábados por la noche y luego se cuelgan de los balcones o se asoman a sus patios a ver la luna que aparece neblinosa, como en un cuento de brujas bonachonas.El tiempo se les escurre entre los ojos, y vuelven a toser los días lunes, con antibióticos y paracetamol encima de la campera, de la camisa de fuerza o del uniforme del trabajo.Tienen algún sueño y lo dejan en Internet ,en un chat telefónico, en la pantallita del celular. No se atreven a salir corriendo por las calles empedradas y gritar a voz en cuello, eso, que estamosnecesitando tanto.

Postal de invierno en calle Leloir.
Aquí va , la hechicera en bicicleta. Los árboles ya se han pelado.Tienen frío. Qué raro, en este junio ella no padece de soledad.Quizás el brujo que la pintó de violeta, quizás el regreso del que siempre vuelve, quizás el amor de quién nunca será. Conjeturas absurdas, si vemos que se detiene y con una camarita digital, intenta atrapar las hojas de ese árbol que de rojo, vira al amarillo o al naranja, pero las hojas salen grises en pantalla. Es el invierno,dice. Es el invierno. Él no le puede mentir a los sentidos. Por eso,la primera que se entera es esa camarita digital . Qué pedantería.Pensar en captar lo inalcanzable. Si de eso es de lo ella se nutrepara seguir pariendo belleza y desolación, con las piernas bien abiertas y al lado del abismo.


I
si el cuerpo se abre
como un altar y defenestra la decencia
pobre de aquel que no se tire al vacío
que no inunde de jugos
el saborde una boca
que pide a gritos

II
leo esos poemas y sé de dónde nace
un útero abierto sangrante
manos únicas venas rotas
una poeta se acerca a mi ventana
no podemos compartir más de dos palabras
el poema ya es demasiado en una mujer

III
si esgrimo un poder que no tengo
es sólo para conquistarte
para voltear esos recuerdos
para que te fanatices en la idea de mí
hasta morir
hasta el último tajo
hasta estrujar
la sábana-menos no- más vamos por más

IV
vaporosa sensación se esfuma como una hoja de otoño
tiñe los gritos me hace pensarte en la pantalla
sentado aburrido socorrido por la distancia
pero algo es más fuerte - decís -esa energía
que proviene de este lado del mundo
dónde la luna no es roja
pero presagia tormentas
dónde las lágrimas se vierten dulcísimas
al compás errático del clonazepán

V
no sé no sé toda esta inutilidad mía
sé hacer tostadas con manteca
y quemar las hojas
también interpreto textos y escribo poemas
el mundo se debate y yo escribo poemas
alguien se muere un niño se asfixia
el imperio fagocita la esperanza y el agua de los mares
la corrupción sale de las cárceles
el trabajo estupidiza tanto como la televisión
y mi rebeldía tan estúpida tan inútil tan sudaca
sólo escribe poemas.




nota: en realidad esta selección la realizó el poeta Aldo Novelli , de Neuquén para el mundo
aldonovelli@yahoo.com

death

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edvard munch, ese noruego brutal